Los Gonzalez Alderete

Partí de Asunción en horas de la noche para llegar bien temprano a la casa de mis amigos Amalia y Julio, en ciudad Presidente Franco; quienes me esperaban ansiosos al igual que yo,  pues planeábamos desde hace un tiempo este documental. 

Me fui con muchas  dudas, como expectativas de cómo nos iría y principalmente de cómo me sentiría sabiendo que ellos son colegas, a quienes respeto y admiro  mucho en lo personal, como así también por el trabajo que realizan.  

Llegué, y Amalia me dice, recostate un rato porque aquí nadie se levanta temprano. La sorpresa fue que había tanta curiosidad y ansias, por lo visto, por el día que nos esperaba, que todos terminaron levantándose super temprano. 

Desfiles, risas, juegos, bailes, cocina, de todo. Todo lo que una familia pudiera realizar a diario.  

Y  ahí empezó mi día; lleno de momentos muy emotivos y hermosos, con una  familia tan al natural, que solo me preocupé de guardar cada momento  único para ellos.  

Gracias apreciados Amalia y Julio por abrirme las puertas de su casa y permitirme ser parte de un cotidiano día en sus vidas.  

Espero que Brenda y Bruno, puedan volver en el tiempo con estos pequeños grandes momentos.